jueves, 29 de marzo de 2012

Historia de los primeros 100 días del gobierno de Aznar: lucha sin cuartel


Desde la misma investidura un acoso y falsedad sin tregua.

Esta historia comienza el día de la investidura de José María Aznar, 4 de mayo de 1996, tras el triunfo electoral con 9 millones y medio de votantes. La herencia dejada por los socialistas es la morosidad: un gran déficit público, y una rampante desaceleración económica causada por el permanente desánimo que provoca la gestión socialista sobre la economía.
Lo más encendido de la lucha en ese día se da por los grupos minoritarios nacionalistas. La señora Lasagabaster de Eusko Alkartasuna quiere hacerse eco de la nula credibilidad que quieren conceder todos a las palabras del discurso de Aznar, diciendo que son sólo buenas intenciones respecto del estado del bienestar y nada más. Le pide además que respete el derecho de libre autodeterminación, que respete la ley y que se cumpla el estatuto de Guernica, ley y estatuto que precisamente el futuro gobierno vasco integrado por EA dará en nada pocos años después, poniendo por encima la lex nacionalista. Se preguntaba Lasagabaster si el pacto de Ajuria Enea se vería cumplido en todos los puntos, lo que visto lo sucedido después puede ahora entenderse como una ironía, pues ya entonces habían decretado la muerte de ese Pacto que se había creado años antes como un acuerdo de partidos democráticos contra ETA y su brazo político. Proféticamente la portavoz de EA decía algo que nos ha animado a nosotros también para escribir esta crónica: “Para mirar al futuro hay que aclarar presente y pasado”, es  decir, teniendo a mano el historial de cada partido, podemos saber en el presente y en el futuro quien está hablando falazmente y a quién hay que creer, sin extender indiscriminadamente el velo del crédito o de la mentira a todos.
Unión valenciana acusará a Aznar de no tener compromiso con el Plan Hidrológico nacional, cuando el compromiso era tan fuerte que lo llevará adelante contra viento y marea, a pesar de los sabotajes contra el envío de fondos que hace el PSOE en Europa, tratando a toda costa de evitar este éxito y de satisfacer el deseo codicioso de conseguir ingresos para Cataluña por el agua derivada a Levante.
El Bloque nacionalista gallego se arrogará por su parte la representación de todos los gallegos, en un planteamiento típicamente totalitario: en nosotros está la pureza de la identidad gallega, y por tanto somos la auténtica nación, deseando una representación simbólica frente a la general de todos sin exclusiones.
Ezkerra republicana de Cataluña por boca de Pilar Rahola lanza una acusación -igual que tantas otras a futuro vista como sarcástica- decía que iba a haber una reducción en las pensiones a causa de la política económica del PARTIDO POPULAR, y no, lo real es que las pensiones mejorarían sustancialmente en los siguientes años, cuando habían estado al borde del colapso, y cuando a ERC en Cataluña, se le da en nada las pensiones en todo el territorio nacional no catalán.
Hablan todos estos grupos minoritarios como representando a todo el pueblo de sus comunidades, y Aznar ha de recordarles a ellos, con sus falsas pretensiones monopolistas y a todos, algo obvio: Vds. no son los únicos defensores de su país, y con esas palabras era demasiado blando, puesto que tras su fachada defensora se esconde la actividad destructora propia de todo cantonalismo contra los suyos.

Mayo, inicio de la legislatura.

Desde el mismo inicio se pone como objetivo el cumplir con los objetivos de convergencia europea fijados en Maastricht, estamos en la tercera fase de la unión económica y monetaria. Aznar promete la estabilidad económica y el rigor presupuestario, que producirían el crecimiento, el empleo el bienestar, todo lo cual se convertiría en realidad. Se promete el inicio del diálogo social, lo que parecía una mera promesa de buenas intenciones, pero que también sería cumplido. Igualmente se promete y acabará cumpliendo dinamizar la vida parlamentaria compareciendo el presidente en el parlamento. Propone Aznar el crecimiento del empleo y que sea más estable, y se cumplirá lo primero pero lo segundo sólo muy parcialmente.
Por su parte, Miguel Angel Rodríguez, portavoz del Gobierno, insistirá en garantizar el poder adquisitivo de las pensiones.
Todo esto en un clima de incredulidad, debido al descrédito de la anterior etapa política, que va a afectar cómo perciben los españoles cuanto ahora se les ofrece.
Contra lo que ahora sabemos fue una gran política económica, se posicionará la Izquierda Unida, por boca de su jefe Julio Anguita, el cual anuncia a bombo y platillo, conforme al estilo de aquel líder, que la confrontación con el PARTIDO POPULAR quedaba servida, tras ser invitado para el diálogo a los 15 días del nuevo Gobierno.
De la anterior etapa quedarán todavía muchos agujeros, entre ellos el de la Seguridad social, por un importe de 200 mil millones. Con toda desfachatez, el ex ministro de trabajo socialista Griñán lo negará, afirmando incluso que no sólo había equilibrio en la Seguridad Social, sino un superávit para las pensiones; esto se logrará más tarde, pero en aquellos momentos el peligroso agujero para los pensionistas era una plena realidad. Como avalando sus palabras, Griñán defenderá que no hay que apartarse del Pacto de Toledo a favor de las pensiones, cuando de facto había sido desestabilizado por el agujero negro económico.
Se arrastra el caso Roldán, exdirector de la Guardia Civil, que se había quedado con un 5% de los contratos dados a los constructores, y además había blanqueado ese dinero negro.
El general Galindo está en vías de procesamiento y cárcel por sus métodos antiterroristas, y sus jefes en el Ministerio del interior socialista, Barrionuevo y Vera dicen que quieren correr la misma suerte que él, la correrán, pero mientras al general le caen varios años de pena, éstos cumplen  sólo tres meses y quedan en la calle. También se solidariza Felipe González con los tres, pero él no sufrirá ni siquiera el tener que declarar ante los tribunales, como fruto de la política salomónica de castigar a los de abajo y dejar libres a los de arriba.
Urralburu, expresidente de la comunidad autónoma navarra, caído en desgracia, con cuentas suizas alimentadas por la típica corrupción socialista (cohecho por el cobro de comisiones por obras públicas), queda libre junto con Aragón, tras seis meses de prisión, y queda sin saberse si tuvo que devolver el dinero o no, lo cual no ha trascendido.
El diálogo social se inicia no con una negociación, sino con un acto de cortesía, que es la presencia del ministro de trabajo Javier Arenas a la fiesta del 20 aniversario de la democracia dada por UGT.
Ahora que se ha ido el PSOE pueden salir mejor los trapos sucios a la luz: Fernando Vazquez, secretario general del sindicato de la policía, denuncia que la Policía no tiene medios, y que los gestores políticos policiales han sido nefastos. Sus denuncias en la etapa socialista se saldaron con su expulsión del cuerpo por el ex ministro Corcuera. Esta carencia de medios constituía una fuente de oportunidades para ETA, y además no permitía la lucha contra la delincuencia en un tiempo en que estaba creciendo. El jefe del sindicato policial no se queda sólo en la denuncia sobre la anterior etapa sino que amenaza con un plante del Cuerpo de policía si el gobierno en curso del PARTIDO POPULAR no actuara de manera que se arreglaran las cosas; finalmente se solucionarán con la dotación de más medios y no se dará la huelga policial.
Producto típico del clima fraudulento de los años 80, Mario Conde, ha de sentarse en el banquillo por falsificación y por no devolver 300 millones de la venta con fraude de empresas, además de por el pago de 600 millones sin justificar a la empresa Argentia Trust. El saneamiento del banco de Conde, Banesto, le costará al estado 190 mil millones.
En materia de previsiones, el Gobierno PSOE había hecho unas previsiones de crecimiento por completo irreales. El nuevo ministro de economía Rodrigo Rato ha de decir que esas previsiones eran imposibles, que el crecimiento no es el previsto, y más aún que la realidad de la desaceleración económica la sabía perfectamente el anterior gobierno. Rato dejaba claro que la previsión excesiva había sido una argucia, se trataba de hacer previsiones muy altas para que la opinión pública achacase su no cumplimiento a la ineficacia del PARTIDO POPULAR; un pequeño torpedo, uno más como herencia para el nuevo gobierno PARTIDO POPULAR, que afortunadamente había salido a la luz, siendo desactivado. De todos modos, Rato anunciaba medidas para reactivar rápidamente la economía, que enseguida pudo salir del bache arrastrado desde la gestión socialista.
En los primeros veinte días de gobierno se despliega una impresionante actividad de gobierno con los siguientes resultados: apertura del diálogo social, visita a los países vecinos de Francia y Marruecos, impulso (muy fuerte) a la política antiterrorista, reforma del sistema nacional de salud, Insalud, reducción de cargos públicos innecesarios y del gasto, con una gran agilidad en las acciones, y se dan los pasos para la profesionalización de las fuerzas armadas.
En cuanto a la visita a Francia, todo parece fácil porque Aznar y Chirac el presidente francés, serían a primera vista ideológicamente afines, pero al cabo de unos años se haría patente, a pesar de los mínimos pasos en común, la rivalidad sorda entre los dos países, con un estado francés empeñado en que España no levante demasiado la cabeza.
En su visita a Marruecos, Aznar dice ver el futuro con optimismo, lo que se hará realidad no enseguida, porque el nuevo rey marroquí nos echará en pocos años graves pulsos con el objetivo de someternos por el temor; sólo después de la firmeza del Gobierno se pondrán las cosas en su sitio y Marruecos, (no hay que olvidar que es aliado de Francia) se decidirá a bajar su agresividad. Uno de los objetivos de la visita es la deuda marroquí con España, y sin duda ésa ha sido una de las claves de las crisis posteriores con los fenómenos estrambóticos de la crisis militar del islote perejil, la arribada de inmigrantes desde la costa marroquí o la presión sobre nuestros pesqueros.
Los hechos por tanto darán la razón a Aznar: sólo desde una posición de firmeza podemos salir de las crisis con las que quieren someternos.
Otra visita en este mayo inicial es la de Mayor Oreja, ministro del interior a Méjico, quien se entrevista con el procurador general de allí para conseguir la extradición de etarras anidados allí durante demasiados años.
Se deja claro respecto de Cuba que no habrá ninguna colaboración salvo la humanitaria; socialistas y comunistas de Izquierda Unida se rasgan las vestiduras porque eso no favorecería la llegada de la democracia a la isla ni beneficiaría a las empresas españolas; IU dice que no somos sino vasallos de EE.UU. lo cual no es cierto, pues la posición española, claramente expresada por el ministro de exteriores Abel Matutes será la de enfrentarse a la ley norteamericana Helms-Burton, dirigida al aislamiento económico de la isla, como medio para acabar por consunción con el odioso régimen cubano; esto para España no es asumible por ser a costa del buen pueblo cubano que pagaría las consecuencias, mientras sus dirigentes seguirían estando protegidos de sobra por sus privilegios.
Ante la posición española de apartar sus pechos alimenticios, abundantes y ocultos durante la etapa socialista, Cuba amenaza, nos advierte de que llegará para nosotros una etapa complicada, sin embargo, vista la situación al cabo de los años, era una amenaza vacía, de la que afortunadamente no se hizo caso.
Continúa vivo el caso Roldán, que a pesar de todas sus mentiras dice lo que parece a toda lógica una verdad elemental, que no se la van a creer los tribunales: Felipe González conocía perfectamente la guerra sucia antiterrorista y lo sabía porque se lo había dicho José Barrionuevo. El mes va a finalizar con toda una serie de procesos en marcha: el de los Albertos, el de Mario Conde, y aún más relacionados con el régimen anterior los casos Gal, Roldán, y Vera.
Rafael Vera, el antiguo director general de seguridad, acosado por el caso Gal, intentará “iluminarlo” exponiendo su “verdadera” realidad, todo ello no habría sido sino una conspiración entre el juez Garzón y el director del diario El Mundo para derribar a Felipe González. En algo tenía razón, sin el valor y tenacidad de ambos, Felipe González todavía seguiría en el gobierno haciendo de las suyas.
El PSOE anuncia que va a hacer una dura oposición, sin embargo se verá enseguida que todo lo que utiliza son clichés muy débiles y que a la postre revelarán que no hace sino retratarse a sí mismo en espejo invertido, como ocurre a menudo con los acusadores encarnizados, porque aquello de lo que acusa al PARTIDO POPULAR es justamente lo que el PSOE ha venido haciendo durante su tiempo de gobierno. Por ejemplo, dice que en las privatizaciones le guía al gobierno el amiguismo o que abandona la ponencia de sanidad porque se quieren cargar el sistema público de salud (Ciscar) y lo que hará precisamente el Gobierno será reforzarlo saneándolo a partir de la situación maltrecha en que había quedado. Pero nadie pedirá cuentas ni recordará al PSOE sus acusaciones y “predicciones” catastróficas que nunca se cumplen, y que además siguen sembrando el descrédito hacia el sistema de las declaraciones políticas públicas.
Aznar, hará la entrega de los premios al trabajo sin partidismo, tanto a Fraga como a Nicolás Redondo, a la actriz Aurora Redondo, a título póstumo, tanto a un modesto trabajador de la construcción y a un empresario nombrado por sus mismos empleados. Expondrá Aznar como mérito de ellos el mismo que será su propio leit motiv: “estar más pendientes de su trabajo que de su imagen”. Desde el principio hará frente a la corrupción, al despilfarro y a la guerra sucia, para evitar que el nombre de España se vea manchado por esas tres lacras.
Con el PNV y el gobierno vasco se viven tiempos de miel tras los acuerdos para la investidura, pero enseguida comenzarán nuevas exigencias. Atutxa a la sazón consejero del interior del gobierno vasco quiere intercambio de información sobre la lucha contraterrorista por parte de las fuerzas de seguridad y de la Ertzaintza; el gobierno contemporiza, pero es obvio que no la quiere dar, ¿cómo la podría dar teniendo la seguridad de que ETA está infiltrada en la Ertzaintza? Por cierto que estos días, finales de mayo, Eta persigue con saña al empresario Arratibel, le pone una bomba en su empresa y más adelante acabará asesinándole.
Cambio de territorio: dirigentes del PSC, socialistas catalanes gobernantes en el ayuntamiento de Barcelona, cometen irregularidades económicas con la empresa Movilma a la que adjudican contratos de obras en colegios públicos sin presentar los avales de dinero necesarios, y desviar fondos para no pagar deudas.
El 30 de mayo se hablará de diálogo institucional entre Atutxa y Mayor Oreja, al tiempo que queman una oficina de hacienda en Rentería, se ataca a empresas de trabajo temporal y se produce una oleada de extorsiones de Eta. Egibar,  portavoz del pnv, luego acreditado como máximo negociador con eta, dice la obviedad de que herri batasuna está en manos de ETA y expone como confidencia que el único papel que asignan al PNV es el de facilitar el diálogo Estado-ETA; esto se cumplirá en realidad, pero no de una manera tan simple cuando años después el PNV asuma en su integridad la lucha institucional independentista, sumándola a la lucha armada de ETA por su parte, para arrinconar al Gobierno, debilitarle, desprestigiarle y arrancarle a España el país vasco.
Mientras tanto, otra petición más: la de cambio en la política penitenciaria de presos en la reunión que mantendrán Aznar y Arzallus.
El sindicato de la ertzantza Erne ve venir lo peor y ruega a ETA que no les ponga en su punto de mira, que hagan el diálogo, no la violencia. Naturalmente ETA ni se inmutará por ruegos semejantes, antes bien lo tomará como un halago tembloroso ante su poder.
En entrevista televisiva José María Aznar concreta el desfase de las previsiones de crecimiento del anterior gobierno socialista que era de más del 300% (de 3,5 puntos a 1 punto), y del crecimiento del empleo de 300 mil a sólo 125 mil, en suma un listón puesto lo bastante alto para que el gobierno del Partido Popular no pudiera llegar a él y pudiera imputársele como un fracaso. Pero los socialistas no habían subido todas las cifras, las del déficit de la seguridad social las habían bajado: allá donde ellos decían dos mil millones eran en realidad 86 mil millones de pts. y además sin contar con partidas presupuestarias para enjugar el agujero negro.
Además Aznar concreta las acciones inmediatas de gran calado, que como es natural todos tomarán como declaración incumplible, o que de cumplirse sería sólo para la galería maquillando datos, porque a eso habíamos venido siendo acostumbrados por el anterior régimen. Nos equivocábamos, porque las predicciones de Aznar se cumplieron a rajatabla: mantenimiento de poder adquisitivo de los pensionistas, plan de choque para reducir las listas de espera en el insalud, incentivación de la economía; unión de confianza y rigor con el mantenimiento de las prestaciones sociales. Además, de cara al exterior anunciaba la decisión de estar entre los países con peso en Europa, para lo que primero en 18 meses había que cumplir los criterios de convergencia –que de nuevo casi nadie ni fuera ni dentro creía que cumpliríamos- en apariencia imposibles pues suponían casi la cuadratura del círculo: reducir a un tiempo la inflación, el déficit y el endeudamiento y todo eso con muy escaso margen de calendario por delante.
Sobre la cuestión antiterrorista le preguntan en plan equidistante a Aznar por la posible ilegalización de la entonces Herri Batasuna y la rumoreada ley de punto final para el caso Gal, y contestaba Aznar que se tomarían las mejores decisiones sobre el primero de los asuntos, y un no rotundo para el segundo; todo impecablemente legal, ya que se dejó en manos de los cada vez más concienciados jueces la lucha con la ley en la mano, una conciencia que el gobierno no había teledirigido si no es por vía de predicar con el ejemplo.
Sobre la profesionalización de las fuerzas armadas, Aznar se quedó corto, la anunció para 6 años después y la realizó en sólo 4 años; esto eleva la credibilidad de Aznar, ya que en sus previsiones propende a quedarse corto antes que cumplir tarde o mal.
Por su parte Felipe González estaba más preocupado por el prestigio de España en... Cuba, y se sumó a las amenazas cubanas de días anteriores, diciendo que romperían los socialistas el consenso en política exterior si no se seguían dando las gratuitas ayudas a Cuba.
Nada más llegar al gobierno declara Aznar que no se creía imprescindible, que su función era transitoria y su deseo, citando a Séneca, de cumplir con honradez y autenticidad, suavizando las cosas. Lo primero se lo reconocerán todos pero a la chita callando, y de lo segundo nada de nada, porque tras el compás de espera de la primera legislatura, viendo la oposición que hacía las cosas demasiado bien y que eso alargaría la estancia del Partido Popular en el poder, decidieron convencer al país de que todo lo hacía mal, en el sentido de que cualquier problema por circunstancial que fuese era culpa los gobiernos del Partido Popular, ya fuera central o autonómicos, y a fe que estarían muy cerca de imponer esa visión lo que hubiera sido un infortunio para el país.
En junio comienzan a llover los primeros frutos del frente internacional antiterrorista con la firma de convenios de extradición de etarras de países de la UE como Alemania, Bélgica y Francia. Frente a este éxito, de México no se obtiene igual actitud.
En el frente interno, el presidente extremeño del PSOE, Rodríguez Ibarra comienza con sus reproches de victimación contra Aznar, diciendo que le discrimina y que le da a Pujol lo que quiere por sus votos (en realidad es que se ha iniciado la política de corresponsabilidad fiscal con las autonomías, comenzando por la que más aporta). Por este tiempo se comienza a estudiar en serio la cesión administrativa del 30% de los impuestos.
Se sucede el anuncio de medidas económicas prácticas, privatización de empresas públicas con pérdidas tras su saneamiento claro está, liberalización de las energías, gasóleo y gasolinas, y se tranquiliza a los trabajadores acerca de la hullera Hunosa, sobre la que no se hará nada antes de su saneamiento.
Ante las que enseguida se revelarán excelentes medidas para el empleo, CCOO. amenaza con movilizaciones por no consultarles, y desde luego yerra por completo al declararlas negativas, error clamoroso que, como el resto de sus yerros nunca después reconocerían. Al día siguiente de estas amenazas sale a la luz que en mayo del 96 se ha dado la tercera mayor rebaja del paro en España en lo que va de década, con 67.000 parados menos. La cifra de paro es ahora de 2 millones doscientos mil parados, la tasa de paro es del 14,6% y el número de colocaciones ha subido a 738 mil. El coro sindical no se hace esperar para minusvalorar estas cifras como fruto de la simple estacionalidad, mientras que el PSOE quiere atribuirse el éxito (Griñán) cuando la verdad es que disminución de paro y aumento del empleo serán debidos netamente al fin de la incertidumbre política de la agónica y económicamente estranguladora etapa PSOE.
De Felipe González en estos días de junio sobresale su increíble declaración, con total desparpajo como la mayoría de las suyas, de que nunca existió despilfarro socialista.
El precio de los intereses baja al 7,25%, con lo cual sube la bolsa y baja la deuda pública y de los particulares.
Un tribunal de Madrid condena al Estado al pago de 15 mil millones por la expropiación de Rumasa en 1983, una de las primeras acciones “económicas” del PSOE; de esa manera 20 mil pequeños accionistas de las distintas entidades del holding de la abeja pudieran cobrar; aunque no se concedía ni una peseta para Ruiz Mateos, se reconocía que el daño había sido no sólo contra el empresario sino contra una gran multitud de gentes de modesta condición.
El PNV reivindica la mesa de Ajuria Enea como foro para la discusión política, lo hace porque de momento es una incógnita lo que ocurrirá con la mesa tras el reciente ascenso del PP al poder, pero como no podía ser de otra manera, el PP seguirá siendo leal. Pero a los dos días de su do de pecho pro Ajuria enea, el portavoz peneuvista Rubalcaba, aprovechando el rechazo al órgano permanente Euskadi-Navarra, dirá que “toman nota” y amenaza veladamente el pacto de Ajuria enea.
Al juez Jiménez Alfaro le estalla un paquete bomba que afortunadamente no acaba con su vida.
Hay una mesa redonda en TVE con presencia relevante de los directores de prensa José Luis Gutierrez y Pedro J. Ramírez, que ayuda a desvelar algunas anécdotas que simbolizan muy bien el estilo PSOE en materia de libertad de prensa. Gutiérrez fue objeto de querella criminal por desacato cuando desveló las escuchas ilegales a partidos hechas por Alfonso Guerra, y su persecución por el poder socialista duró 13 años, un período que se llenó de “tumbas” de periodistas. A su vez, Pedro J. reveló como al final de otro debate en TVE 8 años antes, el entonces ministro de interior, Corcuera, le dijo “te crees muy seguro porque eres director de periódico, pues bien, lo vas a dejar de ser muy pronto”, y efectivamente le echaron, lo que finalmente condujo a este famoso periodista a iniciar la fundación de un diario nuevo, el Mundo, al que haría baluarte de la libertad de expresión contra el poder socialista con la verdad por delante.
El plan de choque de sanidad quiere reducir la espera media de operaciones quirúrgicas a 4 meses, incrementando el número medio de operaciones en los hospitales del insalud, pasando de una espera media de 7 meses a 4, aunque más de 21 mil personas llevan esperando más de un año. Esto era una situación angustiosa para los enfermos y sus familiares. El método para superar esto era aprovechar los recursos de las clínicas privadas. Para diciembre el objetivo era reducir la lista de espera a 2 meses.
Los sindicatos médicos, dentro de la tónica general de escepticismo a todos los niveles, declararon que el poder siempre ha creado expectativas que luego no se cumplen, pero esta vez sí se cumplieron.
Otro agujero económico monumental, era el billón 300 mil pts. en deudas de las administraciones públicas y privadas con la seguridad social, de las cuales nada menos que 500 mil millones iban a ser de muy difícil cobro, y todo dentro de la práctica habitual de que “como todos somos estado, pues no pagamos”, sin tener en cuenta que endeudar a la S.S. es poner en peligro las pensiones de los españoles. Para solucionar el problema y ayudar a sanear la S.S. se inician conversaciones con las administraciones públicas, sobre todo autonomías y ayuntamientos.
El clima es de amenazas veladas, tanto de sindicatos como del PSOE, aunque al final se vió que no era más que presión y que no llegarían a más. De todos modos, se levantan voces que piden ir adelante en las medidas para cumplir los criterios de convergencia, cueste lo que cueste, es decir, la huelga general, que entonces era más que previsible, aunque como decimos no se cumplió. Los sindicatos dicen que el diálogo social es sólo para abaratar el despido, en falsa y grosera simplificación para la galería, que ellos mismos descubrirían cuando poco tiempo después firmasen flamantemente el gran acuerdo social. Pero el gobierno no se achica y responde que si el diálogo social fracasa no tendrá más remedio que actuar, es decir, gobernar.
La asignatura de religión queda declarada con el mismo valor y condiciones que el resto de asignaturas.
Responsables económicos del psoe emiten sendas falsedades: Griñán dice que se estarían tomando decisiones para reducir los ingresos del estado sin que se compensen por otro lado, y Solbes, que se estaba dejando sin combatir el déficit público. Por su parte los secretarios generales de los sindicatos se declaran contrarios a que se reduzcan las cuotas a la Seguridad social, una medida neta que fomenta el empleo. Y en medio de este clima sale Anguita a plena trompeta diciendo que toda la izquierda debe conjuntarse para la ofensiva contra las medidas neoliberales. No lo toma nadie en serio, pero él quedaba muy bien.
Se aprovecha cualquier resquicio para hacer una extrapolación grave y global contra el PP, los sindicatos dicen que el gobierno no tiene voluntad de negociar porque el secretario Barea, -mantenido por el PP a pesar de ser una herencia del PSOE, que retrospectivamente podía ser visto como un saboteador- decía que le parecía bien bajar las cotizaciones a las empresas y subirlas a los trabajadores. Por su parte el jefe socialista Benegas habla de despilfarro de los ayuntamientos del PP porque un solo alcalde, el de Oviedo había duplicado su sueldo, pero sí señala el desinterés del PP hacia las viviendas de protección oficial, asunto que se volvería grave con la enormidad de subida del precio de las viviendas, y ante el que el PP tardaría en reaccionar 8 años.
Otro jefe socialista, Bono dirá que el PP pone en peligro la vertebración del estado por lo del sistema de financiación autonómico, que estaría a favor de catalanes y vascos. El tiempo acabaría mostrando, como en tantas otras cosas, que era el PSOE el auténtico peligro para esa vertebración, con su política años después de aliarse con quien fuera y pactar cualquier exigencia nacionalista con tal de subirse al poder que perdiera en 1996.
Se vota la ampliación de la ley del aborto el 19 de junio a un cuarto supuesto, el de causas socioeconómicas graves; será rechazada gracias a la mayoría del PP, pero el clima de la votación es intencionadamente frívolo, se busca que no tenga el menor dramatismo, con muchos de los diputados escuchando la radio sobre el coincidente partido España-Rumanía, en el que España se jugaba su clasificación.
El presidente navarro, el socialista Otano, aparece como titular de una cuenta en Suiza alimentada con comisiones ilegales. El Psoe le carga con todas las culpas y le echará del partido, pero más adelante se sabrá que la cuenta era para cubrir necesidades ocultas del partido y que Otano ingenuamente la había endosado con su firma. El caso evidenciará la falta de escrúpulos en el PSOE para destruir a quien haga falta, incluso a los de su propio partido. También se hará caer como fruta podrida a Montaner, consejero de obras públicas de la junta de Andalucía, por dejarse corromper por Gil y Gil con 86 millones para facilitar calificaciones de edificabilidad. Es impensable que Montaner u Otano hubieran actuado en solitario. Tras estos casos se hacía obvio un círculo vicioso al que el partido socialista parece obligar a sus cargos: tenéis que rubricar con vuestro nombre prácticas fraudulentas para el conjunto del partido, pero si os descubren os pondremos el baldón y os echaremos a la calle.
Un atentado terrorista le siega las piernas a un empleado de la patronal guipuzcoana, un atentado que iba dirigido en realidad contra uno de los líderes de la patronal, Urtxegi; Korta es el presidente de la patronal, un hombre cabal, que tiempo después moriría asesinado al estilo de los peores mafiosos.
Sigue el plan de reparto de fondos autonómico, siendo los criterios: Población, renta, y nivel de pobreza. Se quiere aumentar la oferta de suelo urbanizable, medida que se declararía como insuficiente por completo ante el aumento del coste de viviendas, y sin embargo, la oposición se opone duramente diciendo que eso no es más que la vuelta al urbanismo salvaje.
A vueltas con el pacto de Ajuria enea, Ardanza dará la de cal y la de arena, como es norma en el Pnv, dice que el pacto ha de tratar tanto de la lucha callejera como del acercamiento de los presos. Mayor Oreja desea que los partidos estén unidos y dispone una política individualizada de acercamiento de presos, no como medida indiscriminada. Atutxa exhala vapores de bonhomía para los terroristas, diciendo que la sociedad sabrá ser generosa incluso con “quienes como vds. han hecho sufrir tanto”. Se discute sobre la posibilidad de un diálogo con ETA  y Mayor Oreja advertirá con total acierto que no es sino una trampa para dividir a los partidos, aunque en realidad el pnv sólo estaba con el pp de cara a la galería. Arzallus dice que todo gobierno debe mantener contactos con Eta, y Ardanza reconoce que sigue hablándole a ETA, porque estos son momentos muy favorables, ya que “ambas partes” pueden ahora asumir riesgos, sobre todo el pp, ya que es nuevo en el gobierno (en realidad Ardanza, le estaba dirigiendo un mensaje a ETA desde la televisión). Se descubre por boca del propio Perez esquivel que el gobierno socialista negoció un año antes con ETA por medio de este interlocutor, lo que había negado el ministro del interior socialista Belloch.
Eta emite una carta con un objetivo doble, palo y zanahoria, hace una propuesta de negociación y reivindica los atentados de Vallecas y Salamanca. Ardanza les dirá a los recién promocionados de la ertzaina que no caigan en la provocación, es decir que sean sufridos, y todo ello después de ser muchos de ellos apaleados, apedreados, baleados,  quemados y destrozados por bombas.
El PSOE no sólo ha sido un pésimo gestor de España sino también de sí mismo, nada menos que 8 mil millones tiene de deuda según un documento interno.
En el frente europeo, nueva reforma dañina para España, esta vez en el sector de las frutas y hortalizas, que nuestra Loyola de Palacio consigue frenar.
PSOE e IU agitan la bandera del empleo, en relación con las privatizaciones, como si fueran los que tienen el monopolio de la defensa de los puestos de trabajo y como si sus políticas no fueran en esencia de consecuencias antiempleo.
Más agujeros en las cuentas socialistas que nunca hubieran sido descubiertos de seguir el PSOE en el poder, en este caso de TVE, con un enorme agujero de 96 mil millones de pts. que el anterior director general, García Candau, dice que es un simple déficit previsto y autorizado. Además, el presupuesto comprometido de la televisión pública fue sobrepasado en 7 mil millones.
El mes de junio culminará con la tercera tregua de la historia de ETA, en pleno tiempo de secuestro del funcionario de prisiones Ortega Lara, al que todavía le quedaba mucho tiempo para ser liberado por la guardia civil.
En el mes de julio, se hace más claro que cumplir los criterios de convergencia a finales del 97 es una obsesión para el Gobierno de Aznar, para lo que se sigue luchando contra el fraude fiscal y de la seguridad social, de manera que se consiga dinero contra el déficit de manera legal. La oposición torpedea a fondo el nuevo proceso de privatización de empresas públicas, tanto PSOE como IU, y desde luego UGT. El líder de la central UGT dice que el ajuste significa el colapso económico y que hay que crecer para conseguir fondos, y no mediante recortes del gasto público; menos mal que no tuvo consecuencias prácticas, porque de lo contrario no se habría llegado a la convergencia europea, pues el ajuste supuso la reactivación económica y los fondos públicos mejoraron gracias tanto al recorte no ya en el gasto sino en el despilfarro heredado de la etapa anterior, así como mediante el crecimiento. Como augur económico, Méndez era un auténtico desastre, pues además de lo anterior sostenía también que era imposible reducir el déficit, que en el proceso se desfiscalizaría a las rentas de capital, y que el ajuste estaría basado en el recorte social.
Aunque en la etapa socialista se habían privatizado nada menos que las siguientes empresas: SEAT, Pegaso, la expropiada Rumasa, Telefónica, Argentaria, Endesa, ahora los socialistas ponen el grito en el cielo y diseñan negros nubarrones en el horizonte, por las nuevas privatizaciones proyectadas con muchísimo más rigor que las anteriores. En realidad no son privatizaciones completas, ya que el gobierno sólo tiene un porcentaje de participación y no hay ninguna implicación social añadida, se privatizarán Enagas, Gas natural, Auxini, y la aseguradora Musini.
Almunia, el entonces líder socialista, propala mentiras entonces todavía bastante creíbles, porque repetían los mitos fuertemente enraizados en el imaginario público por históricas propagandas: entre sus “diagnósticos” sobre el nuevo presupuesto está el que favorecería a los pudientes, que no se dialoga con los sindicatos y que se quiere además hacer pagar a los que menos pueden.
Ahora está casi olvidado, pero el ajuste económico estaba amenazado en todos los frentes y fue un triunfo del Partido Popular a pesar de todos los malos augurios y las amenazas de la oposición a cara de perro. No es exageración, Anguita, el respetado líder de IU plantea la guerra total contra la política económica del gobierno, y el dilema es : “o vencer o ser vencidos, o que los asalariados venzan o que venza la derecha”. Además escribe a Felipe González y a sindicatos para luchar juntos. Se beneficiaba de una patente de corso que tienen los líderes de la izquierda para decir barbaridades sin que se las recriminen. Y ni derecha ni asalariados ni nada, sino simple sentido común fue el que se aplicó, pero que si se hubiera cedido a las amenazas todo hubiera sido un lamentable fracaso que España habría pagado muy caro, pues desde Europa, sobre todo Alemania y Francia, pronto nos mirarían con lupa y suma desconfianza, ante nuestra emergencia.
En este momento, hay que repetir porque parece que está olvidado, todos amenazan, hay una cadena de amenazas para que el Partido Popular no saque adelante el programa económico, que sacará a España de la postración económica.
Cipriano Císcar, portavoz del PSOE, tiene visión en espejo invertido que suele aplicar la izquierda desde sus complejos, sosteniendo como muy serio que “nosotros vamos a ser la oposición fuerte y responsable”. Eso era lo que el Partido Popular supo hacer como oposición, pero el PSOE sólo era capaz de hacer oposición psicópata.
Mientras tanto, los aparentes socios catalanes, contemplan el panorama desde la equidistancia, en lugar de defender al gobierno y su política económica que ellos comparten, sólo se les ocurre decir que “hay una guerra de titulares de prensa entre sindicatos y gobierno” (Durán y Lérida)
El ambiente judicial con relación al terrorismo sigue estando dominado en esta época por las sentencias incomprensibles, tras las cuales sólo puede adivinarse el miedo. La audiencia de San Sebastián emitirá una sentencia que declara no haber intención de quemar en un atentado con resultado de graves quemaduras a ertzainas en Rentería, la sentencia sostiene que los autores simplemente eran responsables de lanzar un cóctel molotov, pero sin más intención. Increíble.
Los sindicatos siguen su campaña contra las privatizaciones a mediados de julio, esta vez haciendo salir a escena a diez mil de sus delegados. Los jefes sindicales dicen lo contrario de la realidad, como siempre en esta crisis, que las privatizaciones ponen en peligro la incorporación a la moneda única (falso de toda falsedad como se comprobaría más adelante) y repiten machaconamente que reducen las prestaciones sociales, y nada menos que el jefe Méndez de UGT se presenta como defensor de las empresas públicas, de la economía y de España, ahí es nada, y las cámaras recogieron tamaña irrealidad sin pestañear.
Pero es Eguiagaray el que nos hará comprender qué es lo que hay realmente en la campaña contra las privatizaciones, cuando da el punto de vista del PSOE, que es sin duda el que les había guiado en el pasado: “Es que el Gobierno pierde control social en los sectores con empresas privatizadas”. Pero no, el Partido Popular no quería plataformas de perpetuación de poder atenazando la economía, sino hacer las cosas bien.
Rato, ministro de economía, ha de salir a la palestra para defender lo obvio: sólo se venden por el gobierno las empresas con actividad industrial, no los monopolios ni las obras de arte, y todo ello además siguiendo estrechas normas (nunca antes vistas en el tiempo del PSOE) de transparencia y control del proceso de privatización. Simplemente el gobierno desinvierte en industrias para dedicar el beneficio a otros fines.
Como no podía ser menos, el empleo sigue mejorando, con 33 mil parados menos. En el orden del fraude fiscal salen a relucir 210 mil millones. Muy acertadamente desde el ministerio de economía se apunta a que la lucha contra el fraude no ha de ser visto meramente como un medio de salvar la recaudación del estado, sino como un medio de evitar que el fraude perjudique la competitividad entre empresas, que la rebaja de precio derivada del fraude no evite que las empresas legales pierdan contratos.
Al tiempo sigue el goteo de la corrupción en el PSOE, partido que esta vez tiene que cesar a Montaner, consejero del gobierno andaluz, por habérselas con comisiones ilegales por el sempiterno Gil y Gil, alcalde de Marbella y perseguido de antiguo por la justicia.
En el área del contraterrorismo parece que los partidos están unidos en torno al pacto de Madrid, hablan de unidad, más que nada porque quieren creerselo, como Mayor Oreja que la pondera, incluso Rosa Aguilar de IU dice que es una “unidad de hierro”. Ahora sabemos que era una unidad para la galería, allí estaba Anasagasti, del PNV, que estaba en fase de preparación del Pacto de Lizarra, los propios de IU, quienes acabarían formando con Pnv y Eusko alkartasuna el tripartito sostenedor del proyecto de secesión antivasco, y muy especialmente está Ezquerra republicana de cataluña (ERC) que va a ser la única voz discordante en el encuentro de Madrid, desmarcándose en solitario porque no se hablaba de autodeterminación en el texto conjunto que sacaron los demás.
En agosto, Francia va contra los fondos europeos, exige que sólo se entreguen a países con los criterios de convergencia cumplidos; pocos años después será la misma Francia la que no cumpla con lo que fueran exigencias de Maastricht.
Sigue el goteo de noticias sobre el pasado despilfarro socialista, ahora le toca a los Paradores nacionales, los anteriores gestores habían “maquillado” numerosos gastos, y dejado sin justificar otros muchos, por ejemplo una auditoría revelará que de los 1600 millones gastados en informática, sólo 400 son realmente aprovechables.
El nivel de paro es el doble que la media europea, pero baja al 13,26%, poniéndose en los mismos niveles que 1982, año del inicio del poder socialista. Naturalmente, los sindicatos dirán que la bajada del paro es coyuntural, cierto que se trataba del mes de julio, pero era una bajada estructural, como podría verse con claridad después.
La opinión pública es pulsada a los 100 días de gobierno del Partido Popular por el diario El Mundo, confirma una excelente gestión, de la cual sólo aciertan a enterarse el 30%, diciendo un 30% que era mala y otro 30% que regular. Aznar recibirá un suspenso con 4,79 puntos de valoración; no aclaraba la encuesta ni las posteriores que se han venido haciendo, a la vista de la incongruencia entre la extraordinaria gestión de Aznar y las puntuaciones que se le otorgan, que lo que puntúa la mayoría de los encuestados no es la gestión, sino la estética y la retórica.


A 16 años vista podemos ver que la dinámica es la misma, ir contra el país y contra quien piensa en términos de país. Acoso sin tregua, sea como sea. Igual que en el pasado, pero peor, al ser la crisis mucho más grave, los mismos de siempre se oponen contra quien quiere levantar de nuevo al país, al que primero han destrozado a base de mordidas institucionalizadas. Su interés propio y la destrucción de España son coincidentes.

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